Uno de los métodos efectivos para
mantener los candados en óptimas condiciones es la combinación de limón y sal.
La preparación consiste en mezclar estos dos elementos en un recipiente,
aplicar la mezcla generosamente sobre el candado, permitir que repose de 3 a 5
minutos, luego limpiar con un cepillo de dientes y finalmente enjuagar. En
lugar de limón, también es posible emplear naranja, toronja u otros cítricos
para lograr resultados similares.
Otro aliado eficaz para mantener los candados en óptimas condiciones y con aspecto renovado es el bicarbonato de sodio, que posee diversas propiedades beneficiosas para una limpieza efectiva en el hogar. Este producto no solo ayuda a eliminar el óxido, sino también otras manchas. Simplemente, mezcla bicarbonato de sodio con agua en un recipiente pequeño y aplica la mezcla sobre el candado, Deja reposar brevemente, enjuaga y seca.